The Seventhate, no es cuando duermes cuando vienen las pesadillas

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lavrenti

la flor que llevas en tu solapa
se está marchitando
la flor que se está pudriendo en tu solapa
una vez me fue ofrecida a mí


Este artículo tratará sobre It's not while sleeping that your worst nightmares appear, segundo disco de la banda barcelonesa The Seventhate, debido a dos motivos: su reciente publicación y, muy importante y por eso queremos abrir de esta forma, la celebración hoy mismo, viernes 18 de abril, de la Fiesta Presentación de Red Chalk, división de hardcore-metal de Arindelle Records.

Será en la sala Taboo desde las 22.00 por seis eurillos y con la presencia de Toundra (adelantando su próximo trabajo) y los ilicitanos absurd-core Pink Gamera, más un grupo de Arindelle y The Seventhate, claro.

Antes de comenzar querría yo contaros una anécdota respecto al disco... andaba escuchando el primer tema, primera escucha, y me dió por pensar que tenía alma nirvanera. Para escribir el artículo me puse a releer un artículo de un directo suyo en Barracudas (concretamente éste) y resulta que cerraron entonces con una versión de dicho grupo. Coincidencia o hay algo más que investigar detras, dejemos que Santi Camacho investigue para el programa del domingo.

Traigo a colación esta anécdota por dos motivos: ya conocía al grupo y su primer, y muy interesante, trabajo, The Cooper Test, y puede mostrar la falta de autolimitaciones impuestas por la banda para seguir un determinado estilo o escena. Partiendo del hardcore, y siendo un parte muy importante de la columna vertebral de su sonido, no se coartan y pueden sonar más o menos metaleros, grinderos, post-rockers e incluso jazzies.

1. A portrait of a perfect onanist
2. Just for a brand new pair of shoes
3. Bordeaux mon amour
4. Brainflood
5. Tour de force
6. Prostitute
7. Elephant
8. Dear you
9. The nails
10. Mammon est, nomen daemnis

Así ocurre, por ejemplo, en uno de los temas de este disco, Tour de Force, aunque no abandonen en momento alguno su aplastante sonido (grandes doble bombos) y la voz desgarrada de Jaume. Aplastante decimos, y enmarañado, aún más que The Cooper Test; su nuevo disco tiene cierta tendencia a hundirnos en un tumulto de rítmicas pesadas y guitarras desaforadas. Brainflood o Prostitute exigirán tener un oido musical acostumbrado a los excesos math, aunque en este último tema nos permitan disfrutar de un ligero descanso sobre batería y bajo antes del estallido final.
    give me a shelter
    give me a mask to hide from the ones
    who once played fair


En ocasiones la perspectiva ruidista del sonido hará que algunas melodías de guitarra permanezcan soterradas esperando descubrimiento en posteriores escuchas, sólo para entregarnos un cambio brusco de ritmo al que nos habituaremos rápidamente (no me crean tanta resistencia como, por ejemplo, Dillinger Escape Plan). Just for a brand new pair of shoes nos entregará pasajes que podrían haber deseado Morbid Angel en sus tiempos mozos (si es que los tuvieron). Y, sin embargo, en un nuevo cambio de orientación, este tema nos entregará un final totalmente inesperado, de influencias dificilmente situables y por ello altamente original y valorable.

Las voces, sin ser desgarradas, suenan urgentes y están llamativamente producidas, por Santi Garcia que ha trabajado con Nothink, Moksha o en Nunnery (de quien nos dicen que provienen algunos de los componentes), manteniendo dos líneas que en ocasiones se desincronizan creando curiosos efectos.

Un disco, por tanto, para seres bravos en el que la existencia se vive como enfermedad, en el que concluir que no hay respuesta para estas cuestiones a través de las edades que tenga que sufrir en este particular camino de la vida. Una prueba de fuerza, en lucha contra el conformismo, a través del la exclusión social y la alienación; para resurgir, si no con más fuerza, al menos sí con más resistencia y seguridad.
    and this question flies from my head
    just after the experience that i really though
    what has happened to me
    i love that this happened to me
    and now i'll drink to adore my love


Aparte de Bordeaux, mon amour, que podéis escuchar en su myspace, los mejores momentos del disco los vivo desde el final de Elephant, cuando todo parece haberse derrumbado, en adelante. Dear You, la instrumental The nails y el grandísimo Mammon est, nomen daemonis, que lo cierra, con aires post-metaleros y los detalles de teclado que me recuerdan poderosamente a Burzum (aunque esto es una desviación mía, me temo).

Será en este tema donde haya, por un momento, un breve resquicio a una emocionalidad diferente del hastío y las subsiguientes contestación, rebeldía y rabia; significando una apertura a imágenes de triste belleza. Tardaré en olvidar un tema que me lleva a desear arañar la realidad impuesta por el mero hecho de herirla, ya que tras el velo también está tronando.

quizá debería levantarse
y dar un paso fuera del barro.
tomar un poco de aire fresco
y limpiar su deteriorada cara.



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